Solomillo de cerdo ibérico, de ejemplares alimentados de bellotas en las dehesas de Extremadura.
El solomillo de cerdo ibérico es quizás la carne más exquisita para comer en cualquier ocasión.
Procede de la parte lumbar del cerdo y preparada a la plancha o a la brasa tiene asegurada una excelente textura, sabor y jugosidad porque no tiene grasa.
La recomendación al prepararlo para sentir todo el sabor y jugosidad es tostar el exterior pero mantener el aspecto sonrosado del interior.
Cada solomillo se vende entero y con un peso aproximado de 350 gramos.
Lugar de origen: España
Lugar de cría: España .
Lugar de sacrificio: España
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