Cochinillo entero, ejemplares de unos 4 kilos aproximados.
El cochinillo es desde tiempos inmemoriales, el producto más característico de las tierras castellanas y ha recibido el aprecio de todos los amantes de la buena mesa. Los auténticos tienen su ámbito geográfico de crianza en las provincias castellanas, criados en granjas especializadas dedicadas íntegramente a su producción.
Las características que deben cumplir para su comercialización con este marchamo son una alimentación exclusivamente con leche materna (precepto fundamental), un peso que oscila entre los 4,5 kilogramos y los 6,5 kilogramos y una edad de sacrificio que no debe exceder de las 3 semanas. Nosotros elegimos para la venta en nuestro establecimiento los ejemplares pequeños, de poco más de 4 kilos, pues la experiencia nos indica que son éstos los que aseguran delicadeza, textura y sabor extraordinarios.
Su aspecto está marcado por su color externo blanco, cuasi níveo, y rosado en sus carnes.
La carne de cochinillo es una exquisitez culinaria apreciada por su textura tierna y su sabor suave y delicado. Proviene de lechones jóvenes, generalmente con menos de un mes de edad, y se caracteriza por su terneza incomparable y su piel crujiente cuando se cocina adecuadamente.
Una de las particularidades más notables de la carne de cochinillo es su color claro y su bajo contenido de grasa en comparación con la carne de cerdo más madura. Esta carne tiende a ser más magra, lo que contribuye a una experiencia gastronómica más delicada. Además, su perfil de grasa tiene un equilibrio justo, proporcionando jugosidad sin ser excesivamente grasosa.
El método de preparación tradicional del cochinillo asado es especialmente popular, destacando la habilidad para lograr una piel dorada y crujiente que contrasta con la suavidad de la carne. La carne de cochinillo se presta a una variedad de técnicas culinarias, desde asados hasta guisos, y su versatilidad la convierte en un elemento central en celebraciones gastronómicas en diversas culturas alrededor del mundo. La exquisitez y la textura tierna hacen que la carne de cochinillo sea un deleite culinario inigualable.
Lugar de origen: Segovia (España).
Lugar de cría: Segovia (España)
Lugar de sacrificio: España
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