Si hay un plato que representa al Bierzo en su máxima expresión, ése es la botillada. Un guiso contundente, sabroso y lleno de historia, pensado para compartir con familia o amigos en los meses más fríos del año.
La receta que os proponemos es ideal como plato único para cuatro personas, perfecto para quienes disfrutan de la cocina tradicional sin necesidad de complicarse demasiado. No hace falta ser chef: basta con tener paciencia y ganas de disfrutar de un festín berciano.
Eso sí, reservad la mañana entera, porque aunque la receta es sencilla, la cocción es larga. Y un consejo importante: nunca la hagáis en verano. Este plato se creó para reconfortar el cuerpo y el alma cuando fuera arrecia el frío.
¡Atentos! No echar sal. Únicamente, a la hora de servir el repollo, comprobad su punto de sal.
Acompañadlo con un buen pan candeal y un vino tinto del Bierzo —los elaborados con uva Mencía son el maridaje perfecto—.
4 chorizos picantes del Bierzo (solo ellos tienen ese punto justo de picor)
1 repollo grande
2 patatas grandes (o 4 pequeñas)
Pan candeal
Vino tinto del Bierzo
Preparación previa (la noche anterior)
Sacad los botillos de la bolsa y los chorizos de la nevera y dejadlos atemperar en una zona fresca de la cocina. Así, al día siguiente estarán listos para cocinar.
Elaboración (a la mañana siguiente)
⏱️ Tiempo total: unas 4 horas y 30 minutos.
Colocad los botillos en una olla grande con agua fría que los cubra bien.
Si no tenéis una cazuela lo bastante amplia, podéis usar dos ollas.
Tapad la olla a medias y, una vez que el agua hierva, coced los botillos a fuego bajo con media tapa durante 2 horas.
Pasadas las 2 horas, añadid el repollo picado, las patatas troceadas y, encima, los chorizos.
Cuando vuelva a hervir, contad 30 minutos más de cocción.
Se quita del fuego y se deja reposar todo 1 hora con la cazuela tapada.
¡Y listo para disfrutar!
Cómo servir la botillada
Cada casa tiene su estilo, pero en la familia Mallo Prada de El Bierzo preferimos hacerlo en dos vuelcos:
1️⃣ Primer vuelco: repollo y patatas. La verdura, impregnada del sabor del botillo, está sencillamente deliciosa.
2️⃣ Segundo vuelco: el botillo y los chorizos, acompañados de buen pan.
💡 Truco maestro: cuando sirváis el repollo, regadlo con un poco de la grasa del botillo y los chorizos. Ese toque es pura magia.
Y si os sobra algo de botillo o chorizo… ¡no lo tiréis! Con ellos podéis preparar unas croquetas espectaculares.
Una receta con alma berciana
La botillada no es solo una comida: es una tradición que reúne a la familia, perfuma la casa y celebra la identidad del Bierzo.
Receta cortesía de la Familia Mallo Prada, El Bierzo.
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